DIFERENCIAS ENTRE EL CREYENTE Y EL DISCÍPULO
TODO DISCÍPULO ES UN
CREYENTE, PERO NO TODO CREYENTE ES UN DISCÍPULO
1.- El creyente suele
esperar panes y peces; el discípulo es un pescador.
2.- El creyente lucha
por crecer; el discípulo por reproducirse.
3.- El creyente se
gana; el discípulo se hace.
4.- El creyente depende
en gran parte de los pechos de la madre; el discípulo está destetado para
servir. 1ª Samuel 1:23-24.
5.- El creyente gusta
del halago; el discípulo del sacrificio vivo.
6.- El creyente entrega
parte de sus ganancias; el discípulo entrega parte de su vida.
7.- El creyente puede
caer en la rutina; el discípulo es revolucionario.
8.- El creyente busca
que le animen; el discípulo procura animar.
9.- El creyente espera
que le asignen tarea; el discípulo es solícito en asumir responsabilidades.
10.- El creyente
murmura y reclama; el discípulo obedece y se niega a si mismo.
11.- El creyente suele
ser condicionado por las circunstancias; el discípulo aprovecha las
circunstancias para ejercer su fe.
12.- El creyente
reclama que le visiten; el discípulo visita.
13.- El creyente busca
en la Palabra
promesas para su vida; el discípulo busca vida para cumplir las promesas de la Palabra.
14.- El creyente es yo;
el discípulo es ellos.
15.- El creyente se sienta
para adorar; el discípulo Le anda adorando.
16.- El creyente
pertenece a una institución; el discípulo es una institución él mismo.
17.- En el creyente la
unión del Espíritu Santo es confirmación y meta; en el discípulo es medio para
lograr la meta de ser testigo eficaz a toda criatura.
18.- El creyente vale
para sumar; el discípulo para multiplicar.
19.- Los creyentes
aumentan la comunidad; los discípulos aumentan las comunidades.
20.- Los discípulos de
la iglesia primitiva trastornaron el mundo; los creyentes del siglo XXI están
trastornados por el mundo.
21.- Los creyentes
esperan milagros; los discípulos obran milagros.
22.- El creyente es un
ahorro; el discípulos una inversión.
23.- Los creyentes
destacan llenando el templo; los discípulos se hacen para conquistar el mundo.
24.- Los creyentes
suelen ser fuertes como soldados acuartelados; los discípulos son soldados
invasores.
25.- El creyente cuida
de las estacas de su tienda; el discípulo ensancha el sitio de su cabaña.
26.- El creyente hace
hábito; el discípulo rompe los moldes.
27.- El creyente sueña
con la iglesia ideal; el discípulo se entrega para lograr la iglesia real.
28.- La meta del
creyente es ganar el cielo; la meta del discípulo es ganar almas para el cielo.
29.- El creyente maduro
se hace discípulo; el discípulo maduro asume los ministerios del cuerpo.
30.- El creyente
necesita de campañas para animarse; el discípulo vive en campaña porque está
animado.
31.- El creyente espera
un avivamiento; el discípulo es parte de él.
32.- El creyente
agoniza sin morir; el discípulo muere y resucita para dar vida.
33.- El creyente
aislado de su congregación se lamenta de no tener ambiente; el discípulo crea
ambiente para formar una congregación.
34.- Al creyente se le
promete una almohada; al discípulo una cruz.
35.- El creyente es
socio; el discípulo es siervo.
36.- El creyente se
enreda con la cizaña; el discípulo supera las escaramuzas del diablo y no se
deja confundir.
37.- El creyente es
espiga; el discípulo es grano lleno en la espiga.
38.- El creyente es
"ojalá"; el discípulo es "Heme aquí."
39.- El creyente, quizá
predica el Evangelio; el discípulo hace discípulos.
40.- El creyente espera
recompensa para dar; el discípulo es recompensado cuando da.
41.- El creyente es
pastoreado como oveja; el discípulo apacienta los corderos.
42.- El creyente
recibió la salvación por la cruz de Cristo; el discípulo toma su cruz cada día
y sigue a Cristo.
43.- El creyente espera
que oren por él; el discípulo ora por los demás.
44.- El creyente se
congrega para encontrar al Señor; el discípulo trae la presencia del Espíritu
Santo.
45.- Al creyente le es
predicada la salvación por la
Sangre de Cristo; el discípulo toma la Santa Cena y anuncia a
las potestades de los aires la victoria de Cristo en él, para gloria de Dios.
46.- El creyente sigue
intentando limpiarse para ser digno de Dios; El discípulo no se mira más y obra
en la fe de que Cristo le ha limpiado.
47.- El creyente espera
que le interpreten las escrituras; el discípulo conoce al Señor y habla de Él.
48.- El creyente no se
trata con miembros de las diferentes denominaciones; el discípulo se hace como
los demás para ganar a algunos de ellos para Dios.
49.- El creyente busca
consejos de los demás para tomar una decisión; el discípulo ora a Dios, lee la Palabra y en fe toma una
decisión.
50.- El creyente espera
que el mundo se perfeccione; el discípulo sabe que este no es el Reino de Dios
y espera su venida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario